Cerrar la llave durante el lavado de manos o afeitada ayuda a ahorrar agua

• Poner en práctica hábitos sencillos nos ayuda a que haya más agua disponible para otras personas.

En esta época de escasez de agua debido a la falta de lluvias y el cambio climático, acciones que parecen insignificantes son indispensables para el ahorro del vital líquido.
Es por ello que el Interapas se interesa en compartir a la población consejos prácticos para promover el cambio de hábitos respecto al uso del agua, en actividades cotidianas como el lavado de manos o la afeitada del rostro.
Abrir la llave del agua para lavarse las manos implica el uso de al menos 7 litros por cada ocasión y en el caso del afeitado no es la excepción, ya que muchas personas se observan, exploran o simplemente curiosean con su rostro frente al espejo mientras el agua se va por la coladera.
En este descuido se pueden gastar hasta en más de 20 litros de agua potable que se van directo al drenaje, sin ningún uso.
Por ello al momento de afeitarse van algunas recomendaciones:
– Use un recipiente con un poco de agua para hacer enjabonadura.
– Tome otro con un tercio de litro para enjuagar la navaja.
– A menos de que el agua esté muy contaminada con restos de jabón cambie el agua para refrescar tantoel rastrillo como el tu rostro.
– Si usa crema para afeitar no es necesario usar agua para la enjabonadura.
– Solo hasta que termines de rasurarte podrás abrir el grifo para darte el enjuague final.
No es recomendable rasurarse mientras se ducha, ya que al pretender ahorrar tiempo y agua, su uso se duplica al permanecer más tiempo con la regadera abierta.
Necesitamos cambiar nuestros hábitos de uso de agua, ya que estaremos ahorrando agua para un futuro.
Se comparte esta información por su relevancia para el público en general; no está influenciada por intereses individuales o afiliaciones políticas.