Supercomputadoras de la NASA están demasiado obsoletas y ponen en peligro los viajes espaciales.
En el ámbito de los jugadores y aficionados a la informática, es muy común escuchar la frase “tienes una computadora de la NASA”, o una versión equivalente. Aunque esas palabras sugieren que la computadora es poderosa, una auditoría reciente muestra que la agencia espacial carece de las computadoras tan poderosas como pensábamos. En realidad, las supercomputadoras de la NASA están obsoletas.
La mayoría de los equipos de supercomputo de la NASA trabajan con CPUs y tienen pocas GPUs integradas, lo que los hace lentos en comparación con los estándares actuales. Esto ha generado dificultades dentro de la organización.
Según The Register, los centros de informática de alta tecnología de la NASA están “sobrecargados y obsoletos”. Esto hace que las operaciones de la agencia sean más difíciles debido a los problemas causados por equipos obsoletos.
Cuentan con cinco equipos en total, distribuidos entre la instalación NASA Advanced Supercomputing (NAS) en Ames, California, y el Centro de Simulación Climática de la NASA (NCCS) en Goddard, Maryland. Y es que una de las computadoras más importantes de la agencia espacial solo tiene 48 tarjetas gráficas.Para cualquiera de nosotros, puede parecer mucho en términos de hardware, pero en términos de computadoras de alto rendimiento, se queda corta.
Frontier, la computadora líder del TOP500, se encuentra en el Laboratorio Nacional Oak Ridge (ORNL) del Departamento de Energía de los Estados Unidos y tiene 37,888 GPU Radeon Instinct MI250X. La lista se publica dos veces al año y incluye la clasificación de las supercomputadoras más poderosas del mundo. La supercomputadora Sierra (ATS-2), empleada por la Administración Nacional de Seguridad Nuclear, ocupa el décimo lugar con 17,896 GPUs.
Sin embargo, ¿por qué las GPUs son cruciales? Una arquitectura de procesador que originalmente se pensó para el procesamiento gráfico son las Unidades de Procesamiento Gráfico. Sin embargo, debido a su capacidad para realizar grandes cantidades de cálculos matriciales, se han vuelto muy populares en campos no relacionados con los videojuegos, industria para la cual fueron diseñados.
El hecho de que puedan realizar operaciones en paralelo es uno de sus principales atractivos; son ideales para el procesamiento de grandes cantidades de datos, simulaciones científicas, modelado del clima o análisis de datos astronómicos. Realizan tareas mucho más rápido que una CPU porque pueden manejar tanta información.
Por lo tanto, la NASA no está cerca de alcanzar el primer lugar en supercomputación. La preocupación ha aumentado por la situación actual de los centros de computación de la agencia, lo que podría afectar “la capacidad para cumplir con sus objetivos de exploración, científicos y de investigación”. En este momento, la principal preocupación es actualizarse para cerrar la brecha tecnológica que la NASA tiene con los centros de computación más poderosos del mundo.