¿Que es el sarampión?

¿Qué es el sarampión? El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa causada por el virus del sarampión, que pertenece a la familia Paramyxoviridae. Afecta principalmente a niños, aunque cualquier persona no vacunada puede contraerla.

¿Cómo se transmite? El sarampión se transmite de persona a persona a través de pequeñas gotas en el aire cuando una persona infectada tose o estornuda. También se puede contagiar al tocar superficies contaminadas y luego tocarse la cara. El virus puede permanecer en el aire y en superficies durante varias horas.

Síntomas: Los síntomas del sarampión suelen aparecer entre 10 y 14 días después de la exposición al virus. Incluyen:

-Fiebre alta (que puede alcanzar hasta 40°C)

-Tos

-Rinorrea (secreción nasal)

-Conjuntivitis (ojos rojos y llorosos)

-Manchas de Koplik (pequeñas manchas blancas en la mucosa bucal)

-Erupción cutánea: generalmente aparece 3 a 5 días después de que comienzan los síntomas, iniciando en la cara y extendiéndose al resto del cuerpo.

Cuidados:

-Prevención: La mejor manera de prevenir el sarampión es mediante la vacunación. La vacuna del sarampión generalmente se administra en la infancia, en combinación con las vacunas contra las paperas y la rubéola (MMR).

Cuidado en caso de infección:

-Aislamiento: Mantener a la persona infectada alejada de otros, especialmente de quienes no estén vacunados.

-Hidratación: Asegurarse de que el paciente beba suficientes líquidos.

-Alivio de síntomas: Se pueden usar medicamentos para reducir la fiebre y aliviar la tos. Consultar siempre a un médico antes de administrar medicamentos.

-Atención médica: Si se sospecha de sarampión, es importante buscar atención médica. La mayoría de las complicaciones son más graves en niños menores de 5 años y adultos mayores.

Complicaciones: Aunque muchas personas se recuperan sin problemas, el sarampión puede llevar a complicaciones graves, como neumonía, encefalitis y, en casos raros, la muerte.

Conclusión: El sarampión es una enfermedad grave, pero totalmente prevenible a través de la vacunación. Mantener una buena inmunización y estar alerta ante los síntomas son claves para proteger la salud de la comunidad.