Meta elimina los fact-checkers y apuesta por notas comunitarias
Se suspenderá su programa de verificación de hechos en los Estados Unidos. Esta decisión representa un giro significativo en las políticas de moderación de contenido de la empresa, y parece estar alineada con las posiciones que podría adoptar la administración del próximo presidente estadounidense, Donald Trump.
En un comunicado divulgado este martes, Mark Zuckerberg, CEO de Meta, explicó que se eliminarán los verificadores de contenido, como los conocidos “fact-checkers”, y que serán reemplazados por un sistema de notas comunitarias, similar al que emplea la red social X, antes conocida como Twitter. Según Zuckerberg, la medida responde a una creciente percepción de parcialidad política en el trabajo de los verificadores de hechos, quienes, según el ejecutivo, han erosionado la confianza de los usuarios más que haberla fomentado.
Zuckerberg también mencionó que la empresa reducirá la cantidad de restricciones en temas como inmigración y género en sus plataformas, que incluyen Facebook e Instagram. Según el CEO, estos ajustes buscan acercar más las políticas de Meta al “discurso dominante”, el cual, según él, no se ve reflejado adecuadamente en las normas actuales.
El anuncio de Meta coincide con las críticas de Elon Musk, propietario de X, quien celebró la decisión a través de un mensaje en sus redes sociales, resaltando que este cambio marca un importante paso hacia la restauración de la libertad de expresión. Musk, conocido por sus posturas a favor de una moderación más flexible en las redes sociales, expresó que las recientes elecciones fueron un punto de inflexión cultural hacia el reconocimiento de este valor.
Este giro estratégico también ocurre en un contexto donde Zuckerberg parece estar buscando una mayor cercanía con el presidente electo Donald Trump. En este sentido, se ha reportado que Meta realizó una donación de un millón de dólares al fondo de investidura de Trump, quien asumirá la presidencia el 20 de enero. Además, la relación entre ambos se ha ido restableciendo desde la suspensión temporal de la cuenta de Trump en Facebook tras los disturbios en el Capitolio en enero de 2021, aunque su cuenta fue reactivada a principios de 2023.
Por otro lado, Zuckerberg ha tomado varias decisiones corporativas que apuntan a una mayor alineación con las prioridades del gobierno republicano. Recientemente, nombró a Joel Kaplan, un exfuncionario republicano, como nuevo responsable de los asuntos públicos de Meta, y a Dana White, presidente de la UFC y cercano aliado de Trump, como parte de la junta directiva de la compañía.
Adicionalmente, Meta tiene previsto mover sus equipos encargados de la confianza y seguridad desde su sede en California, conocida por su tendencia liberal, hacia Texas, un estado con mayor presencia conservadora. Según Zuckerberg, este cambio permitirá reducir las preocupaciones sobre posibles prejuicios de los equipos, lo cual podría mejorar la percepción de imparcialidad de la empresa.