HISTORIA Y RESPUESTA: Juan José Ruiz Hernández, un maestro victorioso
Por Miguel ángel Aguilar/Kriptón.mx
A todos nos estremeció la muerte del querido profesor Juan José Ruiz Hernández y porque nadie como el supo conquistar a sus semejantes que entendieron de su lucha y la secundaron en la búsqueda directa a los problemas, trasformando movimientos sociales, cadenas que fueron liberadas por la audacia de su nombre y el honrar a sus sagrados padres que le inculcaron arrojarse siempre a los principios.
La ciudad y el estado potosino está de luto, quizás muchos ni lo perciban, pero si lo sienten, los potosinos siempre estamos de luto, nada nos pertenece mas que el espanto que se va muchas veces en la rutina que se lleva muy adentro y que se dispersa cumpliendo con debe res y tradiciones, almas que se van dejando muchas melancolías porque quizás en adelante no se vea muy claro quien va a elegir la ruta por donde nos salvemos todos.
El Profe Ruiz supo llenarnos de enterezas que se explican muy bien en la asamblea, el mitin, la regiduría para todos, en nombre de todos los santos luchar por todos a la misma hora en que se reparten los deberes civiles humanitarios y aunque sea un cachito que ayude a que muchos hogares se refresquen con la ayuda inmediata, así sucedió y el profe Juan José lo supo hacer con mucha entereza y ganas de que se expresaran nuevos caminos.
Totalmente devastados, si hay mega melancolía por lo sorpresivo del desencanto, pues hay que decirle adiós a un hermano, a un luchador social enterito que le dio muchos años a la esperanza de que la indolencia y el agandalle terminaran, entonces, adiós a un potosino que le importó demasiado la demás gente, ahí está el ejemplo, la marca indeleble, el magisterio luchón y victorioso por todos los medios.
A nosotros nos invitaba a cantar en sus asambleas populares y mítines académicos, instructivos de toda huella que nunca se borra a pesar de los años y los decenios, ser de izquierda, ser aliado, ser como se puede y debe, deber cumplido, añoranza y gentileza, ejemplo y triunfo indiscutible