CARTAPACIO: Cajas destempladas
Por Raúl Ruiz/Kriptón.mx
En materia diplomática suele haber imprudencias, injerencias, y francas torpezas.
El resbalón de Ken Salazar, encuadra perfecto en las tres.
Pienso que fue una desafortunada reacción a la misiva que días atrás, el presidente López Obrador le envió a Joe Biden, a manera de reclamo, por el financiamiento del gobierno que representa, hacia organismos no gubernamentales, de abierta oposición al gobierno de la 4T.
¿Cómo estuvo el rollo?
El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, aseguró que la elección de jueces por voto popular, como parte de la reforma judicial en México, representa un riesgo para la democracia, además de que se debilitaría la integración económica.
La primera reacción fue de la presidente electa, Claudia Sheimbaum.
“Que extraña e incongruente la opinión del embajador. En 43 de los 50 estados de la Unión Americana, los jueces son electos por votación.”
Mientras que, en la mañanera, López Obrador informó que envió una nota diplomática al gobierno estadounidense por las declaraciones de su embajador.
AMLO responde a Ken Salazar: SRE envió carta diplomática por la “falta de respeto” a la soberanía de México
EU práctica su política injerencista en toda América,”
El presidente Andres Manuel López Obrador comentó sobre la postura del embajador estadounidense sobre la reforma judicial, “es parte de los contrastes que se dan en las relaciones entre los gobiernos de Estados Unidos y México”, dijo.
En Estados Unidos “aplica una política injerencista en toda América, desde que definen lo de la Doctrina Monroe y sostienen que América para los americanos”, y aseguró que en el pasado se ponían y quitaban presidentes a su antojo, invadían y creaban nuevos países sobre la postura de Estados Unidos en el mapa global.
Imprudente la carta que emitió en la víspera el embajador estadounidense.
“Han habido actos de falta de respeto a nuestra soberanía, como esa declaración desafortunada e imprudente del embajador Ken Salazar”, dijo AMLO en su conferencia mañanera.
“No aceptamos injerencismos, no aceptamos que ningún representante de gobiernos extranjeros intervenga en asuntos que corresponde resolver a los mexicanos”, sentenció al mostrar la carta que la Secretaría de Relaciones Exteriores envió a sus pares estadounidenses.
Que extraño caso.
¿Habrá algo oculto entre el gobierno norteamericano y las fuerzas conservadoras mexicanas?
Un espaldarazo así, es inusual y contraproducente a sus propios intereses.
Es rascarle los huevos al tigre con un alambre de púas.
¿La instrucción saldría de la Casa Blanca directamente? Francamente lo dudo.
¿O será una burda jugadita personal del embajador Salazar? Es lo más probable.
O es un caprichito porque a la toma de protesta de la presidente, Claudia Sheimbaum, fue invitado Vladimir Putin.
La reacción mexicana será aplastante.
En el Congreso se dejará caer el peso del plan C. Que por cierto los perdidosos le llaman hoy, sobrerrepresentación.
Vamos a ver las reacciones ulteriores de la semana.
El caso de Salazar está como para declararlo NON GRATO, y despedirlo con “cajas destempladas”
¿Qué significa en materia diplomática, CAJAS DESTEMPLADAS?
En nuestro país, cuando a un embajador lo reciben con beneplácito, el protocolo indica que podrá presentar sus credenciales diplomáticas al presidente, y en el ceremonial, toca la banda de guerra perfectamente afinada, con los tambores bien ajustados… bien templados.
Y si por azares del destino, un embajador es despedido del país, le devuelven sus credenciales diplomáticas y lo despiden con sonidos desafinados y con los tambores aflojados. Destemplados.
Por eso se dice… lo despidieron con CAJAS DESTEMPLADAS.
Voy por mis palomitas.