Amazon está enfrentando un problema importante. La empresa tendrá que recuperar miles de productos defectuosos que podrían causar incendios o descargas eléctricas
Los observadores también participan. Amazon fue responsabilizada por miles de productos con problemas vendidos por vendedores externos en su página web.
Un organismo de seguridad de Estados Unidos revisó detenidamente los productos y, según reportó CNN, le dio dos alternativas a la tienda en línea: quitarlos de la venta o enfrentar acciones legales.
La CPSC de Estados Unidos revisó productos en Amazon y encontró más de 400,000 artículos defectuosos de diferentes marcas.
Según Wired, los productos que no funcionan bien podrían dar una descarga eléctrica al usuario o incluso provocar incendios. Se mencionan objetos que parecen seguros, como pijamas para niños que pueden prenderse fuego, detectores de monóxido de carbono que no funcionan correctamente y secadoras de pelo sin la protección eléctrica necesaria.
Los productos se vendieron desde 2018 hasta 2021, según el sitio web Wired. En lugar de pedir a los compradores que devolvieran el producto, como se recomienda en estos casos, simplemente les notificó que el producto podría tener problemas de seguridad.
Según un informe mencionado por CNN, el comité de seguridad tomó una decisión después de considerar que esta acción no era adecuada.
“Amazon no informó al público sobre estos productos peligrosos y no hizo lo necesario para animar a sus clientes a devolverlos o desecharlos, poniendo en peligro la seguridad de los consumidores y exponiéndolos a posibles lesiones.”
No es cuestión de estar paranoico. CNN Business and other media outlets have reported on serious accidents, such as an office chair catching fire and causing severe burns to a 20-year-old who was sleeping in it. El fuego empezó por un cable de carga genérico de la marca Amazon Basics, conocida por tener precios económicos.
Según Amazon, más del 60% de lo que vende proviene de vendedores que trabajan de forma independiente. Un representante de la empresa dijo a la página web especializada Ars Técnica:
“Estamos pensando en impugnar la decisión. Hace tres años, cuando la CPSC nos informó sobre posibles problemas de seguridad con algunos productos de terceros en esta demanda, avisamos a los clientes de inmediato, les pedimos que dejen de usar los productos y les devolvimos el dinero.”
Durante mucho tiempo, las personas encargadas y los vendedores han debatido sobre quién es responsable en caso de riesgos o accidentes como estos, informa CNN. Finalmente, el organismo de seguridad determinó que los vendedores son responsables, al menos en Estados Unidos.