Historia y respuestas: Jorge Luis Parra Ramírez, el jazz y la docencia por delante
Por Miguel Ángel Aguilar/Kriptón.mx
Ventaja estructural: tener a unos padres a todo dar y el, irse por la guía profesional, la licenciatura de música, el conservatorio de la Universidad de Puerto Rico, estar entre los mejores, dar clases en el Centro de las Artes de su ciudad natal San Luis Potosí, saber escuchar, nunca dejar de divertirse, ese es Jorge Parra, siempre mágico, legal, sorprendente.
Se celebra que junto a otros destacados docentes como Samuel Martínez Herrera, la gran Karina Colis, Anie Batres y una gran gama de otros músicos que cómo el, avivan a las nuevas generaciones en cursos intensivos que le abren paso a numerosos estudiantes con ganas de dejar atrás los discursos musicales que entre comillas aburrían a los respetables, Samuel y Jorge tienen una dinámica muy escolar que hace que sus estudiantes hablen, participen, se presenten., evalúen constantemente lo aprendido y se atreven a ser ya un referente de quien elogiosamente reconocen talento, ganas de estudiar, de arreglar y darle empuje a su instrumento musical.
Es una propuesta muy novedosa.
El mundo musical ha cambiado en los últimos años. Cada vez más cerca de la irrupción a las mágicas corrientes del jazz mundial, ya sea de las bases que asentaron los grandes, como las nuevos estilos y es entonces que los alumnos a favor, ganan en todo momento y dan conciertos, y viajan y participan activamente en una gran gama de temas a estudiar en unas instalaciones magnificas como lo es el CEART y el entorno mágico del Santuario Basílica y la calzada siempre extraordinaria.
Bien por Jorge Luis Parra, sus anhelos, su esposa Melody -originaria de San Juan de Puerto Rico y encargada del área de voz en el mismo Centro de las Artes-bien por su gran entusiasmo y su capacidad pedagógica, filtrando lo ordenado, el criterio, la disciplina, lo ortodoxo, auténtico siempre, con el don de dirigir a los demás y llevar el apellido Bolado y Ramírez con ese porte, ese orgullo, amenidad y embrujo, perfección y alegría musical duradera.