Historia y respuesta: Luis Costanzo Palafox … El adiós a un grande
Por Miguel Angel Aguilar/Kriptón.mx
De nueva cuenta la ciudad es una conmoción y una profunda melancolía , ora por la desaparición física del empresario Luis Costanzo Palafox y quién fue durante muchos años, el símbolo del trabajo, el emprendimiento, el apoyo a la cultura y los chocolates y los dulces que su señor padre trajo como inmigrante italiano al final de los años 20, y que desde lo más profundo del trabajo artesanal al compromiso industrial, logró salir adelante y provocando que en la ciudad fuera ya una tradición desde hace casi 100 años.
Don Luis siempre fue muy amigo de todos nosotros los revisteros y los que nos dedicamos durante años a la actividad cultural y a la promoción de la historia y el estudio y el conocimiento y todo aquello que remitiera a exaltar a la ciudad en su historia, lo recuerdo con mucha atención y con gran privilegio de que operó cardinalmente y con mucha conciencia , con mucha unión hacia nosotros para que eclosionáramos e incubáramos nuestra gélida autoridad para hacer revistas independientes y pasar de lado sensitivo a la zona profesional y fiscal y que le diera color a toda la acumulación del lenguaje que teníamos por los estudios y por la práctica cotidiana de la poesía y la pintura y la danza y el teatro y todo aquello que oliera al humanismo de los potosinos.
Don Luis Constanzo Palafox le gustaba también escribir y siempre apegado a los lineamientos de su señor padre y de su señora madre de cuidar que la fábrica tuviera el éxito deseado y Don Luis pudo hasta la edad de 60 años ,acudir por primera vez a la cuna que su padre en Italia emigró hacia tierras mexicanas y siempre con una carta rápida y movimientos y viajes al extranjero y que nunca renunció a cualquier clase de compromisos que tuvieran por delante la prosperidad de la ciudad, aprovechó su capacidad ordenada para darle a la ciudad ese toque mágico de tener mercadería considerada de la mejor del mundo.
Nuestros proyectos editoriales de hace 34 años siempre tuvieron de Don Luis el apoyo irrestricto desde los primeros tirajes y él siempre me decía que yo no me preocupara, porque su señor padre era también un propulsor de las revistas culturales de los 30 y 40s, concretamente la revista bohemia y la revista letras potosinas y la revista estilo y de otras tantas que dentro del colorido y el poder creativo del pueblo potosino, con su inteligencia de dar a conocer desde su pila bautismal el sentido y la energía que siempre ha poseído para tratar a propios y extraños como hermanos.
Pura gratitud que tenemos ante Don Luis y por su eterno entusiasmo para apoyar todo aquello que nos hiciera inmortales en la energía manifestándose y estremeciendo el sentimiento.
Recuerdo cuando yo trabajaba para el Sol de San Luis, le encantaba Leer mis columnas de historia en donde daba data continuamente de todo lo que yo descubría siendo también becario en el archivo histórico del Estado Antonio Rocha Cordero y entonces tenía a tres Luis que me leían asiduamente y era don Luis Chessal Robledo y Don Luis un historiador muy famoso el que ahora se me va su apellido, y por supuesto don Luis Costanzo al que continuamente le fascinaban los datos descalzos de una historia única en el país como la es la de los potosinos y su gran complejidad de guerras y de emprendimientos y de esplendores y de noticias que estuvieron guardadas durante más de 400 años y es por eso que mis columnas eran realmente de mucho gusto para su curiosidad, por lo que cuando rompí con ese diario, Don Luis me reclamó airadamente por qué no seguía yo escribiendo, por lo que elegí por hacer la revista Respuestas y que en este febrero cumplió 33 años de aparecer ininterrumpidamente. Cada quince días tenia yo sus sendos cheques para que mis tirajes fueran deslumbrantes y con gran apoyo de diseñadores y de pago a colaboradores. De ahí que se hiciera el boom de las revistas culturales que duró fácil 10 años. Yo seguí aferrado.
Don Luis pudo finalmente viajar por el mundo y todo a su tiempo y formar una bella familia y expandir su negocio y apoyar en todo sentido al arte y la cultura y todas las manifestaciones que tenían por decreto engrandecer la educación de los potosinos y la lectura de los textos sagrados con mucha belleza y naturaleza y elegancia y abundancia y sobre todo esa fuerza que a las adolescencias les va por tener siempre una regeneración excepcional y un descubrimiento y una potencia para seguir por el sendero y el camino de conformar una ciudad de la cual siempre se sintió ataviada por el eterno deambular y la transmisión de las experiencias permanentes que nos ha dado el sabor prestidigitador de los chocolates y dulces de la invención de su señor padre y la perfección de él mismo.
Y nosotros le decimos a Don Luis Constanzo, de verdad muchas gracias por todo el apoyo y todo el interés que puso con nosotros, en el plano afectivo, en el plano económico y nunca la manera ilusoria de hacer ni pasivos ni escondidos ni fríos ni agotados, ante el drama que vive nuestra ciudad y nuestro estado, sino mostrar el músculo y la sabiduría del pueblo potosino que siempre sigue ceñido a una cruzada de manifestar el poder de coronarse como un pueblo que finalmente tiene más cultura que ningún otro en el país y eso se debe siempre al equilibrio práctico y a la esperanza aportada por un Luis Constanzo que siempre fue nuestro aliado y el que nunca olvidaremos