Advierte IMSS que la temporada invernal afecta principalmente a personas adultas mayores
La llegada de la temporada invernal y la exposición a las bajas temperaturas provocan infecciones respiratorias agudas, influenza estacional y enfermedades en vías respiratorias, por lo que se aconseja proteger a las personas adultas mayores de 60 años, ya que representan a la población más susceptible y vulnerable a los cambios de estación.
El coordinador auxiliar de Salud Pública del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en San Luis Potosí, doctor Leonardo Solano Campos, estableció que, en el caso de las personas adultas mayores, se deben considerar recomendaciones básicas que evitarán padecimientos potencialmente graves.
En primer término, se recomienda evitar cambios bruscos de temperatura. Hay que utilizar la ropa adecuada que evite la pérdida de calor, debido a que, en el adulto mayor, por los cambios propios del envejecimiento, su piel es más delgada y hay menos grasa subcutánea; explicó que, “por este motivo, las personas mayores no regulan convenientemente la temperatura, situación que hace imprescindible que siempre deban llevar ropa que los abrigue al salir de casa y que proteja las vías respiratorias”.
Indicó que se debe mantener una temperatura apropiada en las habitaciones, pero también es importante ventilar las habitaciones abriendo ventanas y puertas durante 15 minutos en la mañana y por la tarde, para evitar ambientes muy secos que pueden dar molestias en las vías aéreas.
A su vez, dijo, se requiere la aplicación de la vacuna contra la influenza estacional, COVID-19 y neumococo, esto evita que presenten enfermedades respiratorias graves que requieran hospitalización; en caso de padecerlas, son cuadros más leves que pueden ser manejados de manera ambulatoria.
“Es muy importante que acudan a vacunarse, porque esto disminuye en 50 por ciento el riesgo de complicaciones y hasta en 60 por ciento el riesgo de mortalidad en caso de tener alguna enfermedad respiratoria”, apuntó.
Recomendó aplicar medidas sencillas como la higiene personal, de manos frecuentemente, estornudo de etiqueta, evitar tocarse el rostro con las manos sucias, limpiar y desinfectar superficies y objetos de uso común que pueden convertirse en transmisores de infecciones.
Dijo que es recomendable usar ropa adecuada, guantes, bufandas, calcetines, suéteres, evitar corrientes de aire y cambios bruscos de temperatura, consumir alimentos con alto contenido de vitamina C, frutas, verduras, ingerir mucha agua y no automedicarse.
Una dieta adecuada también es primordial, debe de brindar un aporte adecuado de energía para generar calor y basarse en proteínas, carbohidratos y grasas, sin olvidar los alimentos ricos en vitaminas y antioxidantes que fortalezcan el sistema inmunológico.
La hidratación juega un papel clave, a pesar de que durante los meses fríos se siente menos sed, se requiere mantener una ingesta mínima de dos litros de agua al día y se deben de considerar otras alternativas como: sopas, caldos, cremas, jugos, gelatina o té, sugirió.
Solano Campos indicó que, si se encuentran diagnosticados con alguna enfermedad y con prescripción de tratamiento farmacológico, es necesario que lo sigan al 100 por ciento, sobre todo si se trata de enfermedades crónicas como la diabetes e hipertensión, ya que, al no estar controladas pueden ocasionar diversas complicaciones.