La triste publicación de Maribel Guardia en honor al primer año de la muerte de su hijo.
Maribel Guardia vivió la peor angustia que puede experimentar una madre: perder a su hijo. Hace un año, Julián Figueroa falleció de manera inesperada a los 27 años.
Aunque mucho se especuló sobre las causas de su muerte, los médicos que examinaron su cuerpo descubrieron que falleció de un paro cardíaco repentino sin causas externas.
No hay lesiones, no hay violencia, fue una muerte natural, nada, nada, nada. Les darán un comunicado de prensa. Uno de los forenses que investigaron el caso dijo: “Fue el día de ayer cuando falleció”.
Maribel hace un posteo desgarrador a un año de su muerte para recordar a su hijo. A través de una publicación en su cuenta de Instagram, cuenta las noches que lloró y cómo logró recuperarse y seguir adelante.
Julia: He pensado en ti, rezado y llorado durante 365 días y noches. Sé que doce meses son solo el comienzo de este gran amor, que crece cada día más y crea un puente lleno de suspiros y oraciones hasta donde estás. Mi campeón, mi Lobito estepario, mi Cachalotito y mi Tato. Maribel Guardia comienza su mensaje diciendo: “Se que del otro lado del puente, no hay dolor ni sufrimiento, solo luz, regocijo y plenitud”.
Acompañado de diez fotografías que muestran a Julián en diversas facetas (incluidas algunas de cuando era bebé, niño y adolescente), Maribel continúa con su narración: “Te encuentro siempre cerca de mí en las cosas más pequeñas, como en las más grandes, en la naturaleza, en tu árbol que tanto amabas del jardín, en cada rincón de mi vientre que te vio crecer, en cada rincón de la casa y en mi corazón que te guarda por siempre”.
Extraño nuestras extensas charlas filosóficas, intercambios de libros y apuestas por la película ganadora del Oscar. Vives dentro de mí, incluso en momentos inesperados, me reí de tantos recuerdos alegres y experiencias compartidas. Eras un defensor de las causas perdidas, siempre ayudando a todos, ayudando a los niños con cáncer, regando canciones para recaudar fondos y donando a personas que no tenían recursos para operarse. No tengas miedo de mi, mi querido hijo José Julián, Marco, Mima, Maribel e Ime siempre están conmigo. Tengo 365 razones para decirte: “Viva tu alma, viva mi amor de madre y viva tu memoria”. Maribel cerró su publicación diciendo: “En el cielo Dios y la virgen te guardan, tan cerca de su corazón como yo te tengo del mío”.