Ya no habrá corridas de toros en la Ciudad de México
Una nueva ley de protección animal prohíbe herir o matar toros durante espectáculos públicos, marcando el cierre definitivo de casi 80 años de tauromaquia en la capital del país.
La Plaza de Toros México, el recinto taurino más grande del mundo, ha anunciado de forma oficial que no podrán realizarse más corridas ni novilladas en su forma tradicional. La decisión se deriva de la reciente aprobación de la Ley de Protección a los Animales en la Ciudad de México, impulsada por la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, y avalada por el Congreso local.
Entre los puntos clave de esta normativa se encuentran:
La prohibición total de causar lesiones o la muerte al toro, tanto dentro como fuera del ruedo.
La protección obligatoria de los cuernos del animal, para evitar mutilaciones y preservar su estado natural.
La obligación de devolver al toro o novillo a su ganadería de origen una vez concluido el espectáculo, garantizando su resguardo.
La prohibición absoluta del uso de instrumentos lesivos como la puya, las banderillas, el estoque y el descabello, considerados métodos crueles.
Solo se permitirá el uso del capote y la muleta, lo que limita las futuras demostraciones a formas no violentas de lidia.
Se establecen multas de entre 2,000 y 3,000 UMA (aproximadamente entre $226,000 y $339,000 pesos mexicanos en 2025) por cada toro lesionado o muerto en violación de la ley.
Esta medida convierte a la Ciudad de México en una de las principales urbes de América Latina en prohibir las corridas de toros tradicionales, sumándose a estados como Sinaloa, Quintana Roo, Sonora, Guerrero y Coahuila. La decisión llega tras años de presión social, campañas de activismo animal y fallos judiciales que declararon la tauromaquia incompatible con los principios constitucionales.