Historia y Respuesta: Al maestro Edmundo Balderas Torres la bandera de muchas generaciones
Por Miguel Angel Aguilar/Kriptón.mx
Profunda consternación causó la noticia del fallecimiento del músico potosino Edmundo Balderas Torres y la comunidad musical se estremeció y generaciones de alumnos de inmediato le sirvieron un tributo a uno de los grandes maestros del jazz y de la música clásica.
Un referente de la música en San Luis Potosí en los últimos 50 años, Edmundo Balderas Torres, originario del barrio de San Sebastián, fue activo participante de numerosos grupos de rock y de jazz y uno de los alumnos preferidos del maestro Jorge Martínez Zapata y de muchos otros que vieron esa invención y ese desglose y creatividad para abordar el piano.
Maestro de Piano en el Institito Potosino de Bellas Artes, en las casas de cultura, de clases particulares, asesor de grupos de música, continuo en grabaciones, arreglos y miembro del sindicato de Músicos, Edmundo fue apreciado en toda la extensión de la palabra por su alefria, su buena plática, su conocimiento marxista, su filiación política de izquierda.
Creemos que su Partida es un golpe muy doloroso en la historia de la música popular y profesional y sobre todo de un ejemplo para enseñar de manera didáctica y limpia y destacando por ser uno de los mejores maestros que ha tenido nuestra ciudad para forjar a las nuevas generaciones de músicos.
Estuvimos presentes en la misa luctuosa en su barrio querido de San Miguelito en donde numerosos músicos hicieron acto de presencia, consternados por una despedida de parte de sus familiares y nosotros le decimos: Gracias maestro por tantas enseñanzas y tantos ejemplos, Gracias camarada por tantos años de infinita comunicación y de grandes divertimentos en Pos de la música la amistad y la cultura proletaria y la comunicación verdadera.
Se va uno de nosotros y sentimos el enorme vacío que nos cuesta tanto descifrar pero que también nos da el espaciado entendimiento de que cumplió con su deber y que está en un mejor lugar en donde habremos de entenderlo y dimensionar su grandioso legado junto con su esposa Raquel y sus dos hijas qué tanto lo quieren y lo querrán por siempre.
Su hermano también fue un buen pianista,ahora está de seguro con el y sus queridos padres, siendo una de las familias mas queridas en el entorno del centro histórico y el emblema del piano entre la gente sencilla y que se quiere oportunamente.