De esta manera ha progresado la tecnología en México para anticipar los terremotos
Algunos de los terremotos más catastróficos de todos los tiempos han sacudido la Ciudad de México, debido a que se encuentra ubicada sobre las placas tectónicas de Cocos, Pacífica y Norteamericana. Desde el impactante sismo ocurrido el 19 de septiembre de 1985 y el devastador terremoto de 2017, que dejaron marcadas cicatrices en la sociedad, se han promovido importantes avances en el campo de la ciencia y la tecnología sísmica.
Gracias a estos avances, se ha conseguido anticipar e incluso vigilar el temblor de tierra antes de que ocurra. En Tech Bit te explicamos el progreso de la prevención de terremotos desde la creación de la escala de Richter hasta la integración en tu teléfono móvil.
¿De qué manera ha progresado la tecnología en la prevención de terremotos?
Magnitud Richter
En 1935, el sismólogo Charles Richter ideó la escala de magnitud de Richter, una herramienta que evalúa la intensidad de los terremotos al calcular la energía liberada en el desplazamiento de las placas tectónicas.
Esta escala se emplea en la investigación de los terremotos, ya que sus datos son capturados por los sismógrafos; sus mediciones no tienen fronteras definidas, en teoría oscilan entre 1 y 9.
Dispositivos electrónicos para evitar terremotos.
El temblor que sacudió la Ciudad de México en 1957, apodado el “Sismo del Ángel” debido al derrumbe del emblemático monumento, junto con el terremoto de 1985 de intensidad 8.1, resaltaron la urgencia de perfeccionar la tecnología para detectar movimientos telúricos, así como implementar medidas preventivas y sistemas de alerta temprana.
Como consecuencia de estos sucesos, México promovió una serie de avances tecnológicos al transformar los sismógrafos analógicos en dispositivos digitales capaces de analizar información de manera instantánea. Gracias a esta modificación, los científicos lograron no solo calcular con exactitud la intensidad de los terremotos, sino también crear sistemas de vigilancia.
Gracias a la habilidad de los ordenadores para procesar información de forma rápida, se logró detectar de inmediato las vibraciones sísmicas, lo cual fue el punto de partida para desarrollar sistemas de aviso anticipado que permiten alertar a la gente con la antelación necesaria para que puedan evacuar a salvo.
En 1989, surgió una nueva forma de analizar datos que dio origen al Sistema de Alerta Sísmica Mexicano (SASMEX). Este sistema fue concebido para identificar las ondas sísmicas primarias, que se desplazan velozmente pero son menos perjudiciales, y emitir advertencias previas a la llegada de las ondas secundarias, las cuales son las más devastadoras.
Mediante una intrincada red de sensores esparcidos en áreas con alta actividad sísmica, SASMEX tiene la capacidad de identificar temblores en el mar o cerca de las costas, y enviar una advertencia a la Ciudad de México con hasta 60 segundos de preaviso.
En el año 2012, se mejoró el sistema para emitir advertencias no solo a través de radios y televisores, sino también a aparatos móviles. Se logró gracias a la asociación con compañías tecnológicas, las cuales crean apps móviles que envían las notificaciones directamente a los smartphones.
En la actualidad, herramientas como “SkyAlert” o “SASSLA” son consideradas imprescindibles por la población, ya que están enlazadas con el SASMEX y otros sistemas de vigilancia a nivel mundial, como el GPS.
