El 5 de agosto de 1962, falleció en Los Ángeles, Norma Jeane Mortenson, mejor conocida como Marilyn Monroe, el ícono sexy del cine.
En aquel momento, la actriz hollywoodense fue encontrada sobre su cama, luego de haber sufrido un paro cardíaco por sobredosis de medicamentos. Sin embargo, algunos expertos aún debaten sobre su trágico final.
Los forenses apostaron oficialmente por la tesis de un «probable suicidio», pero debido a los vínculos con el poder que tenía la actriz de 36 años, su desaparición se convirtió en un terreno abonado para el florecimiento de teorías conspirativas que alimentaron el enigma.
«Creo que ésta es una de las cosas que ayudan a mantener la leyenda de Marilyn viva, no saber cómo murió, por qué murió, y es algo muy intrigante», comentó Scott Fortner, un reconocido experto en la figura de Marilyn Monroe.
«Se dice que fue una sobredosis, un suicidio, un asesinato… una de las teorías más populares es que la familia Kennedy tuvo algo que ver. He oído hasta que los extraterrestres la mataron, es un poco ridículo algunas veces. Desafortunadamente pienso que nunca sabremos lo que pasó», dijo Fortner.
Para este estudioso de la historia de Monroe, poseedor además de una de las mayores colecciones del mundo de objetos que pertenecieron a la diva de Hollywood, la tesis más creíble es que Marilyn tomó demasiados barbitúricos sin darse cuenta.
«Creo que fue una sobredosis accidental. No creo que fuera un suicidio o un asesinato. Ella acababa de renegociar su contrato con el estudio Fox, estaba preparada para volver al trabajo en la película Something’s Got to Give. No creo que ella fuera una persona suicida», manifestó Fortner.
Las irregularidades encontradas en los procedimientos de la investigación sobre su muerte -con informes policiales que contradijeron las pruebas forenses, un listado incompleto de las llamadas telefónicas de Marilyn,análisis toxicológicos que no se hicieron o la tardanza de las autoridades en acudir al domicilio de la actriz- contribuyeron a generar sospechas.
Se especuló que Marilyn, tras su aparente ingenuidad, iba a revelar secretos sobre JFK y su hermano Robert Kennedy; también se rumoreó que el FBI andaba detrás de lo que sabía la actriz sobre la supuesta relación de Frank Sinatra con la mafia, y que los gánsteres deseaban echar mano a información que presuntamente tenía ella sobre altas instancias de esa agencia federal.
En 1982, el fiscal del distrito de Los Ángeles, John van de Kamp, decidió estudiar de nuevo el controvertido caso después de que un exempleado de la oficina del forense hablara de la existencia de un diario de Marilyn con nombres y datos de personas en el Gobierno.
Aquel texto nunca se encontró, pero su mera sospecha justificó la investigación que terminó con la redacción de un informe de 30 páginas que dio por buenos, en líneas generales, los resultados de 1962.
Se ratificó el suicidio como causa probable de la muerte, aunque se admitió también una posible sobredosis accidental, mientras que se mostró «escepticismo extremo» sobre la hipótesis de un homicidio, ya que hubiera requerido «una conspiración masiva».