Un parásito muy peligroso: las garrapatas
Las garrapatas son parásitos externos que se adhieren a su piel, alimentándose de la sangre del felino y pudiendo ocasionar problemas, esto debido a que quedan enganchados a la piel del animal y, en caso de estar infectados con alguna enfermedad grave. Aquí te mencionamos algunas de las más comunes que pueden ser causadas en los felinos:
Enfermedad de la garrapata (Anaplasmosis, Ehrlichiosis y Babesiosis): Estas enfermedades son causadas por diferentes bacterias y protozoos que pueden ser transmitidos a través de las garrapatas. Los síntomas pueden incluir fiebre, letargo, pérdida de apetito, cojera y anemia.
Enfermedad de Lyme: Aunque esta enfermedad es más común en perros, también puede afectar a los gatos. La enfermedad de Lyme es causada por una bacteria transmitida por las garrapatas y puede causar síntomas como fiebre, cojera, inflamación de las articulaciones y debilidad general.
Hemobartonelosis felina: Esta enfermedad es causada por una bacteria transmitida por las garrapatas y afecta a los glóbulos rojos de los gatos. Puede provocar anemia, letargo, pérdida de peso y debilidad.
Es importante destacar que no todas las garrapatas transmiten enfermedades, pero la prevención y el control de garrapatas son fundamentales para proteger a los gatos. Si encuentras uno de estos parásitos en tu felino, es recomendable retirarla cuidadosamente con pinzas o un instrumento adecuado, asegurándote de no dejar la cabeza de la garrapata incrustada en su piel.
Si sospechas que tu gato ha sido expuesto a una garrapata o si observas síntomas preocupantes, es importante llevarlo al veterinario, quien podrá realizar pruebas y recomendar el tratamiento adecuado en caso de enfermedad transmitida por garrapatas.